Metodología

Nuestra metodología combina las fortalezas de las corrientes educativas HighScope, Pikler y Waldorf, creando un enfoque integral que promueve el desarrollo completo de cada niño mediante el aprendizaje activo y la estimulación temprana.

Metodología HighScope

El currículo HighScope se centra en el aprendizaje activo, donde los niños son protagonistas de su proceso educativo. Esta metodología se basa en la idea de que los niños aprenden mejor a través de experiencias directas con personas, objetos, eventos e ideas. Los educadores proporcionan un ambiente rico en recursos y guían a los niños para que exploren, investiguen y resuelvan problemas por sí mismos. Se utilizan rutinas diarias bien estructuradas y se fomenta la toma de decisiones, lo que permite a los niños desarrollar habilidades cognitivas, sociales y emocionales de manera autónoma.

Metodología Pikler

El enfoque Pikler, desarrollado por la pediatra húngara Emmi Pikler, subraya la importancia del movimiento libre y el respeto por el ritmo de desarrollo de cada niño. Se centra en la importancia de que los niños pequeños desarrollen sus habilidades motrices y sociales de manera natural, sin intervenciones innecesarias. En esta metodología, el rol del educador es proporcionar un entorno seguro y adecuado que permita al niño explorar y desarrollar sus habilidades a su propio ritmo. Se da un valor especial a las relaciones afectivas seguras entre el niño y el cuidador, lo cual es fundamental para su bienestar emocional y social.

Metodología Waldorf

La pedagogía Waldorf, desarrollada por Rudolf Steiner, se basa en una visión holística del desarrollo infantil, integrando lo cognitivo, lo artístico y lo práctico en la educación. En esta metodología, el aprendizaje se aborda a través de experiencias sensoriales, el juego imaginativo y la expresión artística. Se da mucha importancia a la rutina diaria, las actividades rítmicas y el uso de materiales naturales que fomenten la creatividad y la conexión con el entorno. La educación Waldorf promueve el respeto por la individualidad del niño y la creación de un entorno donde se sienta seguro para expresarse y desarrollar sus capacidades en armonía con su crecimiento físico y espiritual.

Enfoque Integral CARÜ

Al combinar estos tres enfoques, nuestra metodología busca crear un ambiente donde el aprendizaje es una experiencia viva, en la que los niños se sienten motivados a explorar, descubrir y crecer de manera integral.

Promovemos la autonomía, la creatividad y el desarrollo de habilidades a través de la estimulación y el respeto por el ritmo individual de cada niño y niña. El aprendizaje no es visto como una simple transmisión de conocimientos, sino como un proceso activo y participativo, en el que los niños y niñas se involucran profundamente, guiados por educadores que los acompañan y apoyan en su desarrollo.

Esta metodología asegura que cada niño y niña reciba una educación personalizada que potencia su desarrollo físico, cognitivo y emocional, preparando así las bases para un aprendizaje significativo y una vida plena.

Generando estrategias especializadas para cada grupo etario, en el cual se desarrollará la metodología. Focalizándose en ampliar las herramientas y habilidades ajustadas a las necesidades de cada bebé, niño y niña.